16 de setiembre de 2013. Entrevista
en el programa No hay Derecho de Ideeleradio, en Radio San Borja, por Glatzer
Tuesta.
El riesgo del giro conservador
El
gobierno de Ollanta Humala que ingresó con una propuesta de reforma se juega el
futuro del próximo régimen, porque si la gente siente que ha fracasado, habrá
más posibilidades de que entre un administración de tipo conservador, aseveró
el analista político Juan De la Puente.
“Hemos
tenido, bajo una experiencia de reformismo fracasada, golpes militares o
gobiernos conservadores. El gobierno de Ollanta Humala que ingresó con una
propuesta de reforma se juega también el futuro del próximo. Es decir, si la gente
siente que ha fracasado la reforma, tendríamos obviamente más posibilidades de
entrar a un gobierno conservador con lo que esto significaría para un país como
el nuestro”, aseveró en el programa No
Hay Derecho de Ideeleradio.
“[Habría
más posibilidades de entrar a un gobierno conservador con lo que esto
significaría para un país como el nuestro] que ha duplicado el PBI, pero que
tiene enormes demandas de universalización de derechos, de resolver estas
brechas de la modernidad entre ciudades desarrolladas y un país rural
atrasado”, apuntó.
El
analista consideró, en ese sentido, que la posibilidad de que la lideresa del
Partido Popular Cristiano (PPC), Lourdes Flores Nano, no descarte una alianza
con el Apra revela que hay un intento de posicionarse hacia el centro. No
obstante, estimó que ve complicada que esta situación se concrete.
“Lourdes
intenta anotarse al centro y una de las expresiones es el intento de ir en una
alianza con el Apra, que lo veo muy complicado, pero el hecho de plantearlo es
una corrida al centro. Pienso que de todas maneras va haber una búsqueda del
centro, solo que va a ser mucho más dificultosa porque quizás no vamos a tener
centros naturales, sino forzados por las circunstancias de una candidatura de
una segunda vuelta electoral”, declaró.
Brecha entre el Gobierno y ciudadanía
Por otro
lado, al referirse a la publicación del nuevo sondeo de opinión que revela una
nueva caída en la popularidad presidencial -que este mes alcanza el 27- el
periodista indicó que hay una brecha muy significativa entre el Gobierno y los
ciudadanos en términos de confianza.
“Así como
la confianza es un proceso, con cosas que se hacen durante dos o tres semanas,
no se puede restañar esa confianza para volver a niveles significativos.
Además, hay un humor –lo dice esta encuesta– y otras más contra el poder, lo
político y el ejercicio de poder, que además ya se fue expresando en junio,
julio y agosto. De modo que esta es una encuesta para que esté alerta el Gobierno,
pero no sobre el Gobierno, todos aquellos actores políticos aparece mucha
desconfianza en la gente”, detalló.
De la
Puente argumentó, del mismo modo, que hay una expectativa sobre el cumplimiento
de las promesas y estimó que ello también está relacionado con la capacidad de
operación política por parte del Gobierno.
“Las
encuestas, estas y otras, señalan que hay una expectativa de la sociedad sobre
el cumplimiento de sus promesas, lucha contra la delincuencia, corrupción,
temas sociales, reforma política. Me parece que esta confianza está relacionada
a la capacidad de operación política en este caso del Gobierno”, aseveró.
“Uno
puede ubicarse en el centro, pero eso no basta, tiene que ser activo para
recuperar diálogo y para abrir cancha hacia la derecha e izquierda”, subrayó.
Hay nadinitis, nadinofobia y
nadionología
La
primera dama de la Nación, Nadine Heredia, representa una especie de objeto
político y de comodín para determinados sectores, afirmó, al comentar sobre la
posible postulación de la primera dama.
“[¿Por
qué los medios amplifican tanto el caso Nadine?] Mi impresión es que Nadine es
tomada como una especie de objeto político. Cuando se quiere, sirve para
debilitar al gobierno, esa es la Nadine intervencionista; cuando se quiere, se
le da el poder que tiene y que no tiene”, afirmó.
“[El tema
Nadine] es una especie de comodín para determinados sectores. Cuando el
Gobierno dijo que no compraba [los activos de] Repsol, yo leí ‘qué bien
que esté Nadine ahí’, porque dicen que fue quien sugirió al presidente que
tomara esa decisión”, recordó.
El
analista estimó, también, que habría que ver cuál es el ángulo de la noticia
que recoge el periodismo, al referirse a las declaraciones del congresista
Daniel Abugattás, quien dijo, como un militante más, que confía en que el
Partido Nacionalista volverá a Palacio de Gobierno no con el presidente Ollanta
Humala como candidato, sino con Nadine Heredia.
“El problema es cómo lo levantan los medios
también, porque la opinión de Daniel Abugattás es personal, pero como hay
'nadinitis', 'nadinofobia', y 'nadinología' en los medios de comunicación, una
mención a Nadine se convierte en una portada”, agregó.
Peso constitucional del MEF es
inédito
En la
perspectiva del diálogo habría que incorporar al Ministerio de Economía y
Finanzas (MEF) como un actor porque es evidente que tiene voz propia y el peso
constitucional de este portafolio es inédito en el país, aseveró el analista.
“A mí me
parece que en la perspectiva del diálogo habría, también, que incorporar al
Ministerio de Economía como un actor, porque es evidente que tiene una voz
propia muy por encima de otros gobiernos. El peso constitucional del MEF es
inédito en el Perú, y eso fue planteado en la Constitución vigente a tal
extremo que la Constitución dice que la sustentación del Presupuesto General de
la República no lo hace el premier, sino el ministro de Economía”, anotó en el
programa.
“Es el
único que tiene ese rótulo. Algunos dicen en broma que mejor cada cinco años no
hagamos elección de presidente, sino del [ministro] de Economía. En la idea de
concentrar un centro, es evidente que el Ministerio de Economía debe plantear
el problema del canon y tiene que haber un acuerdo para su reposición, sobre el
retraso salarial, el financiamiento del nombramiento de los profesores, si va
haber gaseoducto andino y el tema de la modernización de Talara. Tenemos cuatro
o cinco temas puntuales”, argumentó.
En este
aspecto, sostuvo que el problema no son las personas, sino las políticas, al
ser consultado sobre la posibilidad de salida del ministro de Economía, Luis
Castilla, planteado en el diálogo por el Frente Amplio de Izquierda.
“[¿Serviría
de algo sacar a Castilla?] Para mí el problema son las políticas, no las
personas. Creo que es un problema de políticas más que personas”, indicó.
Debate
sobre concentración de medios
En otro
momento, al ser consultado sobre la posibilidad de que la asociación comercial
de Epensa con el Grupo El Comercio signifique una concentración de poder y de
medios, sostuvo que el debate da como para dos años y que su discusión incluirá
medidas legales sobre el tema.
“Todavía
estamos en una etapa del debate operacional. Quienes criticamos la
concentración de medios por parte del Grupo El Comercio, por parte de Epensa
nos responden [que] no. Si la República hubiera comprado, igual era
concentración, y no se superaba el 50%. Pasando a una segunda etapa vamos a
entrar a un debate legal y supongo que va a ser en función de las medidas
que acuerden que tomen los medios que se sienten perjudicados”, indicó.
“En el
mundo hay jurisprudencia respecto a la concentración de medios y nos dicen que
las leyes protegen e impiden la concentración de medios en el caso de radios y
televisión, porque tiene que ver con el espacio radioeléctrico. La
Constitución habla de medios en general y hay jurisprudencia en América Latina
y América del Sur sobre este asunto. De modo que tenemos un debate como para
unos dos o tres años que van incluir medidas legales, pero no podemos salir de
este debate sumando mal”, apuntó.
Estrategia política camina al
fracaso
El
expresidente de la República, Alejandro Toledo, debería tener una estrategia
legal más que política, aseveró el analista Juan de la Puente, al referirse a
la forma en que llegó al Perú el ex jefe de Estado, para responder por los
presuntos actos de corrupción y de enriquecimiento ilícito por el caso de la
empresa Ecoteva.
“[¿Cómo
ve el ingreso de Toledo anunciando ser candidato al 2016?] Pienso que él
debería tener una estrategia legal, más que política y mi impresión es que no
tiene clara esa disyuntiva. De modo que se politiza un caso en el cual hay
tantos elementos que juegan en contra de él y denotan que no dijo todo lo que
debió decir. Cuando fue al Parlamento o cuando se le preguntó, eso obliga una
estrategia legal, más que una estrategia política y por ahí puede ser el camino
al fracaso”, argumentó.
Si se hunde
Toledo, se hunde el centro
El analista
y periodista consideró que es muy difícil que el expresidente Alejandro Toledo
pueda intentar pasar como un perseguido político. Indicó, del mismo
modo, que las evidencias dan un horizonte muy preciso al caso.
“En la
discusión está la transparencia de los hombres públicos, y en el mundo, hoy la
política lucha para que los actores políticos no se relacionen con paraísos
fiscales, para que no haya opacidad y haya transparencia. Por ese lado, si esa
es la estrategia, [estas] están equivocadas. El hundimiento de Toledo es el
hundimiento del centro y este es un país que ha cuidado y construido un
centro”, afirmó.
“En las
elecciones del 80 funcionó el centro, la del 85 y 90. No hablemos las otras
dos, la del 2001, 2006 y en el fondo la del 2011 también implica la
construcción de un centro de determinada posición. Algunos dicen que el Perú
está condenado a elegir al centro”, aseveró.
No
obstante, afirmó que el Gobierno está preocupado en reorganizar y reconstruir
el centro y que la situación del exmandatario no permite que tengamos un centro
más estable. Además, considero que ha habido irresponsabilidad del exmandatario
en su posición de garante de Gobierno.
“Hay
irresponsabilidad de Toledo, sobre todo, en su papel de soporte garante. De
hecho cinco de quince miembros de su bancada han salido, eso ya es un
debilitamiento porque es un actor político más en el Parlamento con el cual hay
que tener una relación diferenciada”, finalizó.