Mostrando entradas con la etiqueta Susana Villarán. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Susana Villarán. Mostrar todas las entradas

sábado, 22 de noviembre de 2014

Matar a Susana, aquí y ahora

http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/matar-a-susana-aqui-y-ahora-31-10-2014
La República
La mitadmasuno
31 de octubre de 2014
Juan De la Puente
Las izquierdas procesan con dificultad el resultado electoral. La primera reacción ha sido crucificar a Susana Villarán acusándola de crímenes de lesa política, que irían desde la apertura a otras tiendas y sectores, hasta de una supuesta abjuración de su identidad. Este deleite cainita no debería impedir un balance menos familiar de las elecciones y leer  entrelíneas algunos análisis, sobre todo los que se reducen a las elecciones en Lima, los que ocultan el fracaso de la izquierda partidaria en las regiones o los que minimizan la pérdida de un voto nacional en favor de la izquierda.
Matar a Susana aquí y ahora además de injusto no resuelve nada. En Lima, la derrota es más que una pérdida electoral; refleja dos hechos que serán relevantes de cara al 2016: 1) la derrota de la unidad, una esperanza en un momento crucial de nuestra democracia, precaria y enfrentada al cambio; y 2) la pérdida de un caudal de votos imprescindibles para re-construir una alternativa.
Es cierto que Villarán cometió errores aunque entre estos no se encuentra el esfuerzo de apertura, un gesto que ningún candidato en el Perú podría darse el lujo de subestimar; fueron más bien errores en la ejecución de la apertura, especialmente en la relación con determinados actores. El resto de grupos se fueron por las ramas, desbarrando entre el pragmatismo y el tradicional apuro que deviene de un histórico desorden.
Mientras Alianza para el Progreso (APP) se presentó en 23 regiones, el fujimorismo en 18, y Acción Popular en 16, el Frente Amplio se presentó en 11, el mismo número que el Apra. En donde el Frente Amplio (FA) participó no le fue bien; en Lima, su mejor resultado fue en Ancón (1,22%) y en las regiones, en Lambayeque (2,65%). En algunos casos, como en el Cusco, Puno y Moquegua, el FA se emplazó contra la izquierda regional solo para ser derrotado. Por ejemplo, en Chota, el MAS le ganó al Frente Amplio 42% a 0,7% y en el Cusco Tierra y Libertad obtuvo poco más de 5%.
La limeñización de las izquierdas partidarias es una realidad y el Frente Amplio está prácticamente muerto en tanto que su grupo más organizado, Patria Roja, ha obtenido sus mejores resultados fuera de ella, en Cajamarca y en Madre de Dios. De cara al 2016 se hace patente un derrotero cuyo ritmo será marcado por la agrupación propietaria de la única inscripción electoral; el esquema aprendido en los últimos 35 años está dibujado: una azarosa negociación de pequeñas cúpulas que reciben el nombre de “nacionales” de espaldas a miles de militantes sin partidos y de la izquierda extrapartidaria, que parirá un espacio estrecho resistente a la apertura.
En las izquierdas escasea el liderazgo, ese componente crucial de cualquier proceso de agregación de actores políticos. No obstante, el problema no parece ser solo de perfil e identidad sino también de proyecto. Lo que hace dos años aparecía como una izquierda nueva, innovada por un programa ambiental y reformador institucional, y que iría a estrenarse en estas elecciones, ha tenido poca fortuna y ha sido derrotada en casi todas las plazas donde se procesan conflictos de naturaleza extractiva.
Es tarde para un modelo de unidad tipo Frente Amplio; la fórmula ya no es posible y quizás ni necesaria. Como en otros países, la izquierda existe y ha sido resistente a la prédica depredadora de la derecha y sobrevive a sus propios errores; no obstante, está cada vez menos presente en los partidos y más en la sociedad, en una suerte de dualidad que debería ser asumida, una izquierda partidaria y otra social/regional.
De cara al futuro la interrogante reside en la capacidad de esa maltrecha izquierda partidaria para relacionarse con la izquierda social/regional sin intentar ponerse primero en la fila sino animar una gran convergencia con vocación de apertura. Lamentablemente, sus líderes todavía están ocupados matando a Susana y con un discurso que va en sentido contrario. Es curioso: izquierdas que celebran la apertura de sus pares en Brasil, Uruguay y Bolivia pero que consideran que su deber aquí es enconcharse.

sábado, 5 de julio de 2014

Documento JNE sobre Diálogo Vecinal

Documento del JNE que rechaza sustitución del Presidente de Diálogo Vecinal Sr Becerra por Víctor Guerrero. Es del 4 de junio.

miércoles, 9 de abril de 2014

Una crítica a la encuesta de CPI (9.4.2014)

A propósito del sondeo de CPI sobre intención de voto publicado hoy. Una encuesta de esas características a dos años de las elecciones tiene un efecto muy limitado como para advertir incluso tendencias, menos aún extraer conclusiones, que es lo que leo que se hace con ligereza.
El sondeo incluye a dos “presidenciables” que han señalado que no postularán, Lourdes Flores y Nadine Heredia, y no incluye a otros que han declarado que si lo harán, como Alfredo Barnechea, por señalar solo un caso, o al mismo Luis Castañeda Lossio que no ha dicho sí, ni a la alcaldía de Lima ni a la Presidencia de la República, pero que igualmente es un “presidenciable”. Como en otros sondeos a cargo de otras empresas, el uso de las tarjetas es arbitrario y sin explicación.
Darle carácter de concluyente a estas cifras en un país con una volatilidad electoral alta en procesos electorales presidenciales, es equívoco. Es el caso de Mario Vargas Llosa de cara a 1990, Lourdes Flores el 2001 y 2006 y Alejandro Toledo y Castañeda Lossio el 2011. Siendo en general cierto que toda encuesta, aun a dos años de las elecciones, es una foto debe ser mesurada tanto la presentación como el análisis. No se puede presentar una foto de final de carrera la que se ha tomado en el partidor, cuando los caballos ni siquiera han empezado a correr.
En el caso de Lima, el asunto es más escandaloso y en esto me refiero a CPI. El porcentaje obtenido por Enrique Cornejo, del Apra, figura como tal con 3.6%, pero no aparece Susana Villarán en el reporte oficial del sondeo. En la nota de Correo, el directivo de CPI asegura que el 5,2% de Villarán se ubica en el rubro “otros”. ¿No es raro que a Cornejo, que tiene menos que Villarán CPI lo visibilice y a Villarán no? ¿Quién y con qué propósito hace el vaciado de la data? ¿Cómo atribuir el “olvido” de alguien que tiene más de 5% de intención de voto, si le creemos a CPI? ¿De quién más se han olvidado?
No deja de llamar la atención que en cambio una de las preguntas sea sobre “si es conveniente” que Villarán postule. En los últimos 30 años no he visto en sondeos una pregunta tan abierta y genérica. Quizás debieron agregar el “para quien” es conveniente, si para ella, para Lima, para el país, etc. En otros casos, la pregunta es más precisa: “¿Estaría Ud, de acuerdo con que ……. postule a la reelección?”

viernes, 27 de diciembre de 2013

Cohabitación a palos

http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/cohabitacion-a-palos-29-11-2013
La República
La mitadmasuno
29 de noviembre de 2013
Juan De la Puente
Encuentro extremadamente sesgados los análisis de las elecciones en Lima del domingo pasado para designar a 19 regidores en reemplazo de los vacados en la revocatoria de marzo. De un lado, los ganadores magnifican su victoria creyendo que han ganado todo y que los perdedores han perdido todo; y del otro, se realiza una fácil extensión de los resultados a las elecciones municipales del próximo año y a las generales del 2016.
Los números indican la derrota de la opción que respalda a la actual administración y la victoria de dos grupos políticos, el PPC y Somos Perú, en distinta dimensión. El PPC obtuvo 29,5%, un resultado claro que si bien es lejano del 38% obtenido por Lourdes Flores el 2010, refleja el trajinar de una formación política que presionada fuera y dentro supo apostar a la gobernabilidad de la ciudad. La cosecha de más de 1 millón de votos es al mismo tiempo un premio y un castigo. Aunque sea más lo primero que lo segundo, ese doble mensaje debería ser asimilado con madurez por una formación política que ya sabe asumir el costo de sus decisiones. Si hay un partido que ha ganado y perdido con sudor sus votos, ese es el PPC.
El resultado de Somos Perú es ganancia completa y es ingenuo atribuirla solo a razones emocionales, especialmente el recuerdo de su líder Alberto Andrade. El paso del 4% de votos el 2010 al 25% el 2013 no puede desconocer la polarización municipal de los últimos dos años en la que Somos Perú supo colocarse en una posición menos tirante y más centrista, de modo que el pasado domingo el elector lo ubicó (¿encontró?) como una garantía de estabilidad. Esto vale también para Acción Popular que pasó de 2% a 10%. ¿Fue un voto fácil? Sí, pero los goles son goles.
Extender el resultado del domingo a las elecciones del próximo año y al 2016 es un ejercicio de inocencia. La atipicidad de los comicios es fundamental para impedir inferencias cargadas de futuro: la elección fue de listas y sin rostros en campaña, tuvo poco despliegue de dinero, no participaron grandes partidos municipales o nacionales (Apra, fujimorismo, Gana Perú y Solidaridad Nacional), no acudieron a votar más de 1 millón 200 mil electores (19%), es decir 1 de cada 5, y más de un millón de los que acudieron (19%) viciaron su voto.
A pesar de ello, sus resultados son aleccionadores para el futuro, en consideración a la máxima de que es más fácil perder los votos que se ganan fácilmente, un aviso para Somos Perú, Acción Popular, Siempre Unidos y Perú Posible. El mayor desafío le corresponde, sin embargo, al PPC que ha empezado a moverse entre el bloqueo y la desorientación, convenientemente presionado por quienes apuestan por interrumpir la gestión de Susana Villarán.
Comparativamente, una oposición municipal no tiene las competencias de una oposición parlamentaria. Según la ley, el Concejo Municipal es órgano normativo y fiscalizador y la alcaldía un órgano ejecutivo con un alto poder decisorio que ejerce a través de decretos y resoluciones de alcaldía. Este esquema alcaldista no permite un juego tipo check and balance propiamente dicho y por esa razón las posibilidades de colisión entre ambos órganos es mayor. Sin embargo, el Concejo Municipal puede ser letal al tener entre sus potestades la declaración de vacancia de la alcaldía que si bien necesita los 2/3 de los votos, opera como dinamizador de un estado de guerra municipal.
El oficialismo y la oposición en el municipio metropolitano deben asimilar el nuevo escenario que los condena a cohabitar. Por ejemplo, la oposición podrá exigir el cambio de los funcionarios pero no podrá designar los cargos; podrá bloquear decisiones pero no adoptarlas contra la opinión de la alcaldía; podrá investigar irregularidades vinculadas  a proyectos pero no bloquear su ejecución. En el caso del oficialismo, está claro que un gobierno en minoría obliga a consultar más y negociar mejor, en una lógica menos decisionista. De una cohabitación, incluso a palos, saldrán ganando la ciudad y los actores políticos municipales.

viernes, 29 de marzo de 2013

Ante los profetas, defensa del oficio

http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/ante-los-profetas-defensa-del-oficio-22-03-2013
La República
La mitadmasuno
22 de marzo
Juan De la Puente
El análisis político es un oficio que no pertenece al corazón o al hígado, y que obliga a la objetividad aunque no reclame imparcialidad. Por eso sorprende el aluvión de análisis disparatados de los resultados de la revocatoria del 17M, planteados de un modo simplón donde los perdedores y ganadores integran un cuadro bicolor, blanco para ganador y gris para perdedor, despreciando la delicada imagen de un mosaico lleno de colores y posibilidades.
Estos análisis reflejan una ortodoxia persistente y pasadista, un ejercicio deficiente de la ciencia política que se niega a usar los instrumentos de interpretación; que no aprecia los fenómenos sino solo los hechos; que considera los votos en volumen, confundiendo los partidos con sus líderes y las ideas con los movimientos sociales; y que no analiza las tendencias pero en cambio, profetiza, adivina y sentencia. Es obvio que este ejercicio lleva a un menjunje que vale para el chamanismo pero no para la política.
La votación del domingo sintetiza un cuadro complejo de opciones en pugna por constituirse en tendencias. Los electores han tirado las cartas sobre la mesa y corresponde a los actores políticos y a las instituciones ordenar estas en función de sus intereses y estrategias. Carlos Meléndez acertadamente lo ha denominado un escenario mixto.
En términos personales, Susana Villarán y Lourdes Flores son dos grandes triunfadoras, la primera por ganar una revocatoria dirigida contra ella y la segunda por su incursión decisiva para la victoria del No, exponiendo ante el país una inusual ética pública donde más importan Lima y la vigencia de su partido que su derrota en las elecciones municipales pasadas.
Revocados o no también ganan un conjunto de líderes que constituyen una reserva ascendente de políticos llamados a protagonizar la representación política, encabezados por Marisa Glave, Pablo Secada, Eduardo Zegarra, Alberto Valenzuela y Mónica Saravia, entre otros. Otros líderes como Patricia Juárez y Mauricio Mulder, de la opción perdedora, también ganan aun en el revés.
Es cierto que Luis Castañeda aunque no muerto es el líder que más pierde. No es el caso de Alan García que supo colocarse de perfil y tras su partido en el debate revocatorio. En este tema, es un error confundir el Apra con García y aunque el primero se encuentre en el grupo de partidos que pierden la revocatoria, debe sopesarse el hecho de que tuvo derrotas más severas en las últimas décadas de las que salió airoso. Si se trata de ganar o de perder, no todos ganan o pierden con la misma intensidad; solo si se trata de buscar titulares periodísticos fáciles se puede enterrar con la palabra ideas, grupos, personas y movimientos.
El PPC, qué duda cabe, que es el gran ganador; para la izquierda, en cambio, el 17M tuvo un sabor agridulce, el caso típico de una fortaleza salvada a costa de la debilidad suprema del ejército. Sin embargo, siendo nada deseable, el resultado plantea un nuevo momento para la izquierda que solo será posible con Villarán en la alcaldía.
Proclamar la bancarrota de la izquierda tiene más de brujería que de raciocinio, curioso porque la izquierda ha sido varias veces sepultada sin que esté muerta y porque los sepultureros ignoran la enorme fuerza de la izquierda social. En el futuro será más difícil ahogar a una izquierda moderna que supo abrir la Municipalidad de Lima a la inversión privada, a las asociaciones público/privadas y ahora a un pacto con el PPC y otros partidos.
El 17M no mató a nadie pero plantea desafíos ante los cuales nadie ha comprado un seguro. En las elecciones de noviembre el PPC tendrá que revalidar su ascenso en la capital, la izquierda pugnar por votos propios para acompañar el fin de la gestión de Villarán y el resto de partidos tendrá que figurar en el proceso de cara al 2014 y al 2016. Sin embargo, el principal desafío será para Susana Villarán: si logra cristalizar un gobierno multipartidario y exitoso, este será su mejor carta de presentación para el futuro.

lunes, 11 de marzo de 2013

Encuestas, empate técnico, revocatotoria

Debate sobre el empate entre el No y el Sí en las encuestas, en RPPTV el 8 de marzo, con Ricardo Vásquez Kunze, en el programa las 5 de las 7, con la conducción de Patricia del Río y Guido Lombardi.
 

Debate sobre el debate entre el No y el Sí

https://www.youtube.com/watch?feature=player_detailpage&v=W0VKsmRejaY
En el programa Las 5 de las 7 de RPP TV con Ricardo Vásquez Kunze, bajo la conducción de Guido Lombardi y Patricia del Río.

lunes, 4 de marzo de 2013

A 13 dias de la revocatoria

http://www.ideeleradio.org.pe/web/wNoti.php?idN=6394&tip=especiales
Análisis de la campaña por la revocatoria a 13 días de la consulta, en el Programa "No hay derecho" de Glatzer Tuesta en Radio San Borja (Ideéleradio)
4 de marzo de 2013
Ideeleradio.- Hay un empate técnico y no hay nada decidido en torno a la consulta popular de revocatoria planteada contra la alcaldesa Susana Villarán, que se realizará el próximo 17 de marzo, afirmó el analista político Juan de la Puente, tras estimar que el exburgomaestre Luis Castañeda Lossio está calibrando un nivel de participación en la que podría jugar a ser “la carta de la esperanza a favor del Sí”.
Fue al comentar los últimos sondeos de opinión que son tomados por algunos medios de comunicación y líderes políticos como algo definitivo, en el marco del porcentaje que registra el Sí.
“Yo veo que las opciones están en movimiento hacia arriba o hacia abajo. La encuesta de Ipsos Apoyo, la encuesta que publica La República de GFK, indican que la fuerza está en movimiento y en movimiento intenso. No hay nada decidido, me inclino todavía por el empate técnico y como están en movimiento las fuerzas, las fotos que se hacen del escenario son fotos movidas”, expresó al programa No Hay Derecho de Ideeleradio.
“Dicen que las encuestas son una foto del momento, sí, pero cuando los escenarios se mueven son fotos en movimiento, en algunos casos pueden aparecer más que fotos cuadros pintados a mano, pero las encuestas en todo caso lo que hacen es indicarnos que hay una disputa”, opinó.
El analista político estimó que el proceso de consulta popular de revocatoria a la alcaldesa de Lima, Susana Villarán, se definirá en el sector C, debido a la predisposición de variar el voto a favor o en contra del Sí o el No.
“Creo que la disputa se va a situar en el sector que se mueve más, me parece que es el sector C, donde hay predisposición de cambiar del Sí al No y del No al Sí; y tenemos 14 días. Entonces, hacer un pronóstico y poner un titular definitivo [en la portada de un diario] me parece que es un riesgo periodístico y político”, añadió.
   
Castañeda podría jugar a la carta de la esperanza
Refirió que el exalcalde de Lima, Luis Castañeda Lossio, podría jugar la carta de la esperanza a favor del Sí, aunque opinó que el exburgomaestre es consciente que esta decisión podría perjudicarlo políticamente en un proceso electoral posterior por un tema de revancha.
“[¿La presencia de Castañeda en qué cambiará?, ¿el podría decir, voten por el sí que yo voy a continuar las obras?] Él ya está en la campaña por la revocatoria, probablemente no está de modo activo; no sé si GFK o Ipsos Apoyo han medido la presencia de Castañeda en la campaña y esto ha arrojado que no le ayuda a la campaña por el sí. No obstante, él podría hacerlo o alguien a nombre de él podría hacerlo, es decir ´votemos por la revocatoria porque yo retorno´ y [recuerden que] él se fue con gran popularidad de la Municipalidad Metropolitana de Lima”, declaró.
“Entonces, podría jugar a la carta de la esperanza en el sentido de que no habrá caos si gana el Sí, porque yo estaré ahí. Pero eso también es riesgoso porque en la campaña electoral para la alcaldía de Lima en caso el sea candidato esto también saldrá como una revancha de la sociedad del sector del No que ve cómo se ha agilizado un golpe de Estado cívico contra una autoridad elegida y pondría en dificultad algún tercer mandato suyo”, manifestó.

Castañeda está calibrando
En ese sentido, Juan de la Puente remarcó que el ex alcalde de Lima está evaluando su presencia en el escenario político actual y sostuvo que el empate técnico no era un escenario deseable para el líder de Solidaridad Nacional.
“Yo pienso que él debe estar calibrando, él es un político que piensa bastante que calcula y mide sus pasos. Si no ha salido en todas estas semanas es porque el entendía que hablando perdía y que no hablando también perdía. Que era como escoger entre morir ahogado o quemado. Entiendo que para él este momento de empate técnico no era deseable, por eso probablemente esté impulsado a salir hablar en estos días”, indicó.

viernes, 15 de febrero de 2013

Sí vs. No, la política importa

http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/si-vs-no-la-politica-importa-15-02-2013
La República
La mitadmasuno
15 de febrero de 2013
Juan De la Puente
La reciente encuesta de CPI que indaga sobre la campaña revocatoria contra la alcaldesa de Lima Susana Villarán confirma, aunque en menor medida que la anterior de Datum, la tendencia al alza del No que ha subido 7 puntos porcentuales, y la caída del Sí que ha descendido 4. En un mes, la distancia entre el Sí y el No ha disminuido 11 puntos y se sitúa en 20 puntos, en tanto que el respaldo a la alcaldesa se ha incrementado en 7 puntos.
Las cifras son gruesas y aunque no pueden ser concluyentes revelan los resultados de las estrategias y posicionamientos de las últimas semanas. El Sí ha encontrado los límites de una campaña antipolítica basada en el desprecio de las reglas de juego de la democracia y de la ciudad como espacio de todos. Según la encuesta, las razones de fondo que motivan el voto por el No, son democráticas, es decir, que es necesario que la alcaldesa termine su mandato, que necesita más tiempo para cumplir su programa, que realiza una buena gestión, que la revocatoria genera gastos innecesarios y que tras ella solo hay intereses políticos. En cambio, aunque sigue siendo predominante la supuesta ineficiencia de Villarán como razón principal del Sí, esta se ha debilitado en las últimas semanas. De paso, es interesante constatar que el desalojo de La Parada como razón en favor del No supera en cuatro veces a la misma razón en favor del Sí.
La apuesta del No es por la ciudad, la política y las reglas. En cambio, el Sí subestimó la política, es decir, el apoyo de los partidos y de las personalidades públicas a Villarán bajo el argumento de que los partidos influyen poco en la decisión de los electores. Sin embargo, el 55% cree que el apoyo de Lourdes Flores y del PPC al No favorece esta opción, un guarismo alto que incluye un reconocimiento al gesto personalísimo de Lourdes, contendiente de Villarán el 2010. El apoyo de otros líderes y partidos al No es también valorado positivamente.
¿Cómo entender en ese contexto que, según la encuesta solo el 23% considera que el Apoyo del Apra y de Alan García favorece al Sí, mientras que el 54% cree que no, y que el 49% piensa que el apoyo del ex alcalde de Lima Luis Castañeda al Sí perjudica a esta opción? De primera impresión se señala que la posición del Apra contra Villarán podría haber resucitado el antiaprismo limeño. Las otras valoraciones sobre el Sí y el No señalan otra explicación: que los ciudadanos de Lima prefieren al Apra y a García, que gobernaron dos veces y saben de las dificultades de la gestión pública, más comprometidos con la gobernabilidad que con la promesa de caos que la revocación anuncia.
Es inescrutable la crítica de los limeños al apoyo de Castañeda al Sí, que se contradice con el respaldo del 54% a su postulación a la alcaldía de Lima para reemplazar a Villarán. Es probable que los electores no quieran ver a Castañeda en el fango de los revocadores y que lo separen mentalmente del turbio clan que falsificó firmas y realiza el trabajo sucio de la revocatoria. Desde ese punto de vista, podría ser un grave error embarcar oficialmente a Solidaridad Nacional en la aventura del Sí; en todo caso, lo más cierto es la encrucijada del ex alcalde: si habla pierde y si no habla también.
La lectura de este y otros sondeos indica que los detractores de Villarán están perdiendo la batalla de las voces que, al fin y al cabo, es una batalla pública. A la falta de rostros, bajo la premisa de que el Sí es masivo y no necesita representación, se suma el estilo pendenciero de sus pocos voceros. A esta táctica de choque concurre la presunción de que Lima quiere guerra. Esta lectura está llevando a los revocadores a expresar, paradójicamente, un Sí negativo que cede ante la fuerza de un No positivo.
El Sí persistirá en su estrategia antipolítica y será difícil que supere el tono jacobino y populista que ha convertido en su sello. A ese paso, no solo se enfrentará a Villarán sino también a la ciudad y a las reglas de la democracia.

domingo, 20 de enero de 2013

Los nuevos revocadores

http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/los-nuevos-revocadores-18-01-2013
La República
La mitadmasuno
18 de enero del 2013
Juan De la Puente
La revocación de la alcaldesa de Lima surgió como una algarada de la extrema derecha contra una izquierda moderada que había tomado el poder en la capital; se convirtió en realidad cuando el grupo revocador se organizó como una coalición de intereses concurrentes que recogió firmas usando dinero y métodos turbios, apoyándose sobre todo en las fuerzas contrarias a las reformas que Susana Villarán impulsa. Los recientes acontecimientos revelan una transformación de la batalla por Lima, que ha dejado de ser una disputa reforma vs. antirreforma y amenaza con diluir inclusive el antagonismo entre la capital y los intereses particularmente mafiosos de los antiguos revocadores.
La campaña por la revocación se ha convertido en una batalla política de cara al 2016, una suerte de primera vuelta adelantada. A la posición favorable al NO de Ollanta Humala y Alejandro Toledo le han seguido las de Pedro Pablo Kuczynski y Lourdes Flores. A favor de la revocación, tácita o expresamente, se encuentran Luis Castañeda, Keiko Fujimori y Alan García.
El escenario que plantean estos grandes actores y electores altera relativamente el tablero que ofreció la segunda vuelta electoral del 2011, con dos hechos: la oposición formal de PPK y Lourdes Flores a la revocación, y el ingreso del Apra a la campaña por el SÍ de modo oficial, abierto y frontal, con el silencio positivo de García.
Castañeda y Fujimori tienen sobradas razones previas para apoyar la revocación. Sin embargo, el Apra pudo haberse colocado de perfil en esta batalla haciendo uso del abstencionismo ejercido en la última elección de Lima donde no presentó candidato y administrando con solvencia la exposición pública de García, quien ejercía una ex presidencia casi perfecta.
Solo se entiende el ingreso del Apra al campo de batalla por una poderosa razón: la trabajosa búsqueda de una coalición en la que parece, por ahora, no podrá embarcar a PPK y a su partido próximo a inscribirse y al PPC, aunque sí a Castañeda y a otros grupos menores. Esta coalición será tal en la medida en que el Apra derrote a la izquierda, gane a Solidaridad Nacional (cuyo candidato obtuvo 9% en las elecciones del 2011) y neutralice o sobrepase a otros dos potenciales candidatos que disputarán el espacio de la centroderecha, PPK y Lourdes Flores.
El Apra triunfante en Lima con la bandera de la revocación suena como una promesa; la derrota de Villarán y sus aliados potenciarían a García y consolidaría el proceso de centralización de opciones políticas en favor de una gran candidatura. Al contrario, la derrota de los revocadores sería la afirmación de un escenario de relativa fragmentación con varias opciones en la derecha y el centro.
El camino escogido es audaz pero riesgoso, sobre todo por la precariedad del SÍ y la orfandad pública de los antiguos revocadores, chamuscados por denuncias y trapacerías. En pocos días el APRA ha desplazado del liderazgo de la revocación al grupo inicial y se ha convertido en el centro, el eje y emblema del SÍ. A ese ritmo, en el imaginario de la disputa, Susana Villarán podría aparecer compitiendo contra el binomio Castañeda/García con resultados de difícil pronóstico.
Al APRA no le fue bien en Lima en los últimos 20 años; no obstante, en el segundo gobierno de García, la capital le ofreció su respaldo cuando las regiones se enfrentaron a él en episodios cruentos como los de Combayo, Bagua y Moquegua, entre otros. La campaña de las siguientes semanas demostrará si el antiaprismo limeño resucita o es una cosa del pasado.
Por ahora, la precipitación de los grandes actores políticos en la campaña por la revocación juega en favor de Susana Villarán porque permite apreciar que tras el deseo de retirarla del cargo están poderosas razones políticas y no las pretendidas ineficiencias de su gestión; es probable que a pesar del refuerzo que ha recibido el SÍ, será más fácil para el NO disputar una batalla auténticamente política.

viernes, 2 de noviembre de 2012

La rebelión del hampa. Imágenes

http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/la-rebelion-del-hampa-imagenes-02-11-2012
La República
La Mitadmasuno
2 de noviembre de 2012
Juan De la Puente
Los sucesos del 25 y 27 de octubre pasado iluminaron cual relámpagos varios fenómenos que corrían ocultos en la sociedad. Uno de ellos es la convivencia pacífica entre comerciantes y delincuentes en una zona que moviliza ingentes recursos, coexistencia que solo es posible por las serias restricciones del Estado para ocupar los espacios públicos y brindar allí con mínima eficacia los servicios de seguridad e interdicción del delito. El estallido de violencia de esos días es la explosión sangrienta de un territorio emancipado de la ciudad que el Estado punzó casi inadvertidamente para hacer cumplir la ley.
Las imágenes de la extrema violencia expresan para la mayoría el extraordinario desprecio del hampa por la vida. En ese territorio, sin embargo, y para una minoría creciente, es más cotidiana y ordinaria, y reveladora de la altísima cuota de violencia que la sociedad peruana recibe. Es el resultado de la impunidad en un país donde los barrabravas son tolerados por el Estado al punto que desfilan a los estadios custodiados por la policía ante el miedo de los ciudadanos y mantenidos por los líderes de los clubes de fútbol que les suministran alcohol y dinero. Estas imágenes exponen los excelentes resultados de la pedagogía de la violencia luego de los intensivos cursos de delito y sangre.
Los sucesos de La Parada, no obstante, son más contundentes; el 25 y 27 de octubre asistimos a la primera gran batalla urbana entre la policía y un ejército formado por centenares de delincuentes a cara descubierta. En la primera ronda, el 25, ganó el delito con los resultados conocidos: la toma del territorio, el saqueo y el ataque a los símbolos del orden público. En la segunda ronda, el 27, ganó felizmente la policía gracias a un despliegue masivo, inteligente y decidido y a que el ejército del delito había sido diezmado por las detenciones.
Imposible comparar lo sucedido con los conflictos sociales que atraviesan el país a pesar de que en buena parte de estos se advierten episodios de preocupante y creciente violencia y el desafío al orden público; las partes que confrontan en los conflictos sociales sostienen una lógica argumentativa, ciertamente debatible para los otros actores, pero en el marco de una interacción de las partes. Lo de La Parada fue una asonada, la rebelión del lumpen, un hito significativo en el espiral de delito cuya intensidad probablemente subestimamos.
El mensaje ha sido lanzado. La brutal agresión a la policía ha generado la adhesión ciudadana a ella pero, al mismo tiempo, envía señales sobre el éxito que puede tener el desafío del orden público desde el delito. La imagen de la fuerza pública atacada por el hampa es un poderoso estímulo para el delito y coloca en el debate en busca de respuestas la extrema precariedad de la autoridad policial. Ha evidenciado también la fuerza y grado de articulación de las bandas y su disposición temeraria de enfrentarse en las calles a la autoridad haciendo más patente que nunca la crisis de la seguridad en el Perú.
Los territorios liberados al delito o a punto de estarlo son un laboratorio para futuras rebeliones y espacios de la sociedad en busca de la organización de un orden mafioso que parece haberse cristalizado en varios casos. La alianza de los comerciantes mayoristas y las bandas que defendieron La Parada es la superficie de un fenómeno mayor al que concurren la escasa censura social de ciertos delitos, las complicidades entre los buenos que toleran y los malos que actúan y la emergencia de la legitimidad de las formas de vida al margen y contra la ley.
En ese contexto son muy positivas las iniciativas legales para hacer más efectiva la lucha contra el delito organizado y otras anteriores para recuperar los territorios cedidos al hampa. No obstante, hace falta mucho más que eso, sobre todo una auténtica política criminal para enfrentar un problema que no se reduce a policías y ladrones. Aunque tarde, estamos a tiempo.

jueves, 12 de enero de 2012

Revocatoria, política y derecho

La República
La Mitadmasuno
12 de enero de 2012

Juan De la Puente
http://www.larepublica.pe/columnistas/la-mitadmasuno/revocatoria-politica-y-derecho-12-01-2012


Se registra un debate confuso sobre la revocatoria de la alcaldesa Susana Villlarán. Para algunos, no debería proceder porque la iniciativa está marcada por el odio ideológico y la revancha; para otros, la razón principal reside en la pretendida ineficiencia de la alcaldesa, la que, en defensa de Lima, debería ser echada. Una tercera visión dice que a pesar de los propósitos, la iniciativa es legal.
Un primer ámbito, el jurídico debería ser intangible. La revocatoria es, sobre todo, un derecho reconocido en la Constitución; su existencia enriquece los derechos políticos, particularmente el de sufragio y otros conexos como el de demandar al poder. Incorporado en el texto de 1993 (artículos 2° inciso 17 y 31°) amplía el alcance del artículo 64° de la Constitución de 1979 con mecanismos de democracia directa y de participación.
El derecho de participar en los asuntos públicos asume tres formas: Derecho de elección, democracia directa (referéndum, iniciativa legislativa y revocación de autoridades); y de participación ciudadana (rendición de cuentas). La Ley de los Derechos de Participación y Control Ciudadanos precisa que son derechos de participación la iniciativa de reforma constitucional y de leyes, y de referéndum, y que son derechos de control, la revocatoria y remoción de autoridades y la demanda de rendición de cuentas.
Allí reside el ámbito político de la revocatoria; opera como una forma de control político ciudadano y colectivo, un mecanismo de censura en la misma dirección de otras censuras, como la parlamentaria. Esa naturaleza obliga a un procedimiento, en este caso las firmas, pero el asunto de fondo es el cuestionamiento político a la autoridad y su rechazo a ella, motivado aunque no necesariamente probado.
El derecho reconocido y el control que de él nace, como contenido del principio de la representación, es criticado por quienes absolutizan su condición de democracia directa y se sienten satisfechos solo con la democracia representativa, aunque la revocatoria es también criticada por quienes sostienen que es una evidencia que el sistema político peruano es demasiado abierto. Este es un debate sano, aunque parece difícil oponerse a la revocatoria obviando a sus “hermanas”.
También es cierto que la revocatoria contra Susana Villarán pone sobre la mesa, más que el derecho mismo, el uso de este por facciones conservadoras de la sociedad, liderazgos sociales resentidos y negociantes ávidos de ganancia. Es por ello, una buena noticia que el esfuerzo de los revocadores haya tensado las fuerzas que respaldan a la alcaldesa y, paradójicamente, ayudado a esta a mejorar tanto su gestión como su perfil público. Podría ser el germen de un movimiento que defienda el derecho de quienes vivimos en Lima a construir una ciudad donde mande la gente.

jueves, 6 de enero de 2011

La ciudad imaginada

La mitadmasuno
La República
Jueves 6 de enero de 2011

Juan De la Puente

http://www.larepublica.pe/06-01-2011/lima-ciudad-imaginada
Lima, la cuarta ciudad más poblada de Sudamérica será gobernada por una mujer. Además del género, significativo en un país machista, de pocas alcaldesas y políticas, la diferencia la hacen otros factores como su larga militancia en la izquierda y el haber sido elegida en Lima, acaso ahora la ciudad más conservadora del Perú.
Como anoté en otro momento, en la elección de Susana Villarán no hay un sentido común exclusivo de la izquierda. Las circunstancias de su elección fueron especiales. Inicialmente poco conocida por el elector, supo resumir en su discurso varios rechazos ciudadanos, especialmente al sistema político, y otras adhesiones, particularmente a la transparencia en la gestión pública.
Los retos de la nueva administración municipal limeña se agregan y superponen precisamente por el sentido político de quien la lidera. A la valla alta que le dejan en materia de infraestructura urbana los dos últimos alcaldes se suman las expectativas por una política social municipal y por los cambios en la gestión de una ciudad que supera ya los ocho millones de habitantes.
Quizás por eso su principal desafío sea la cultura de una sociedad que ha producido una ciudad diversa pero al mismo tiempo segregadora, desordenada, egoísta, violenta, limitadora de derechos, contaminada y contaminante. Imaginar una ciudad no será fácil. En la cultura actual un alcalde es sinónimo de obras; la violencia es un problema de policías y magistrados; la pobreza es una tarea del gobierno central; la actividad cultural es una afición de los mecenas; y la generación de oportunidades puede ser una atribución de cualquiera, menos del municipio.
Villarán, a pesar de su moderación política y su izquierdismo liberal, es una disidente frente al discurso que pretende hegemonía y totalidad, una atrevida que merece fracasar como mensaje de ineficiencia de quienes cuestionan el pensamiento único. Es seguro que como todo proyecto de centroizquierda tenga varias oposiciones, a la derecha, a la izquierda, adentro, afuera, en la tierra y en nombre del cielo.
También por ello es decisivo el Acuerdo para Lima que pretende alcanzar en el primer tramo de su gestión. Es obvio que en ese acuerdo deberían caber todos los que representan el mandado electoral reciente en la capital, aunque también hay rostros de presencia ineludible: los “otros” que la Lima oficial se niega a reconocer.

lunes, 18 de octubre de 2010

Análisis de las elecciones regionales y municipales

Canal 7 y La República. 3 de octubre
Luego de las elecciones municipales y regionales participé en algunos debates de análisis de los resultados. El primero fue ese mismo día 3 de octubre, en el Canal 7 (TNP) a las 4 pm. inmediatamente después de los flashes de boca de urna. Lo que se dijo allí lo recogió La República
aquí, resaltando la idea de que volvimos a la normalidad, en referencia a la candidata outsider en Lima.

Instituto del Perú - USMP. 6 de octubre

Luego, por invitación del Instituto del Perú de la USMP, participé junto a Alfredo Torres de Apoyo y Cecilia Valenzuela de Willax TV en un debate en el Hotel Country, el 6 de octubre.
La nota general del evento puede verse aquí.
Las intervenciones de ese debate se pueden ver aquí, editadas en tres partes.
También se puede ver
aquí el power point que elaboré para la ocasión, con algunas ideas, en vías de sistematizar conclusiones iniciales, tendencias y preguntas. Se titula Lima: retorno del outsider y los efectos de la antipolítica.

Willax TV. Cecilia Valenzuela. 15 de octubre
Finalmente, el jueves 15 participé en el programa de Cecilia Valenzuela “Mira Quien Habla”, en el nuevo Canal de Cable y por Internet Willax, una experiencia de TV muy interesante. La entrevista editada en cuatro partes puede verse aquí, aquí, aquí y aquí. Los títulos de los videos que componen la entrevista son de responsabilidad del canal.
Artículos publicados antes y después de las elecciones
Con relacíon a las elecciones del 3 de octubre he publicado algunos artículos en La República.
Antes del 3 de octubre publiqué 9 artículos:
Lima, ¿Una burbuja electoral? 7/11/2009 aquí.
Lima la pobre 6/3/2010 aquí.
Regiones: la política cero 10/4/2010 aquí.
El Caso Oscorima 26/6/2010 aquí.
Ojo con las palabras 17/7/2010 aquí.
Mujeres en campaña 28/8/2010 aquí.
Política social municipal 18/9/2010 aquí.
Tres análisis fallidos 25/9/2010 aquí.
Sucia, rica y pobre 3/10/2010 aquí.
Luego de las elecciones he publicado dos, de una serie de hipótesis de los partidos y candidatos, y pretendo que sean varios:
Hipótesis sobre el Apra 9/10/2010 aquí.
Hipótesis sobre la izquierda 16/10/2010 aquí.

sábado, 16 de octubre de 2010

Hipótesis sobre la izquierda

La mitadmasuno
La República
Sábado 16 de octubre 2010
Juan De la Puente
http://www.larepublica.pe/archive/all/larepublica/20101016/11/node/295242/todos/1634
Antes del 3 de octubre se decía que Lima era conservadora, el norte especialmente aprista y el centro y el sur andinos esencialmente de izquierda. Luego de las elecciones, se dibuja la presencia de la izquierda con claroscuros y disparidades; en la conservadora capital se abre un espacio apreciable para la izquierda que reclama una porción del 38% obtenido por Fuerza Social, en tanto que en el centro y sur andinos la izquierda ha sido derrotada, en las regiones Tacna, Puno y Moquegua, Ayacucho, Pasco, Huánuco, Apurímac y Huancavelica por empresarios o tecnócratas. Allí, las listas adversarias se alzaron, además, con buena parte de las alcaldías provinciales como las de Todos con Ayacucho en 5 de 11 provincias, o del Movimiento Raíces en 5 de las 13 provincias de Puno. En Cusco en 9 de las 13 alcaldías provinciales no triunfó la izquierda.No obstante, la izquierda ha ganado en los comicios regionales en Cusco, Arequipa, Junín y Madre de Dios y ha obtenido los segundos lugares en Apurímac, Huancavelica y Moquegua. Sus versiones locales ganaron alcaldías provinciales, es el caso de Ayni en 4 de las 7 provincias de Huancavelica y Kallpa en 4 de las 7 de Apurímac. El MNI, en su versión regional (MAS), ganó en Cajamarca y César Villanueva (FS) logró en San Martín una resonante reelección.Fríamente, un mapa nacional mostraría que luego de las elecciones hay más izquierda en Lima y menos en las regiones del Perú, distribuidas en un mosaico que permite distinguir hasta cuatro versiones: la izquierda clásica, con fuerte tradición partidaria y sindical; la izquierda nacionalista (PNP), que lidera Ollanta Humala; la centroizquierda, liderada por Susana Villarán (FS); y la izquierda regional, que es parte de las anteriores, próxima a ellas o a sí misma. En la perspectiva del 2011 es imposible una agregación total de estos espacios por razones ideológicas y de liderazgo, de modo que recrear Izquierda Unida, 20 años después, es una opción válida en un laboratorio pero fuera de la política real.Es más probable que el PNP y FS cortejen a la izquierda de las regiones, proceso que empezó hace meses y que se renovará de inmediato. De ese arco iris emergerán por lo menos dos candidaturas presidenciales y frente a esa posibilidad una media verdad afirma que tendrá más éxito la que se abra más al centro. Sí, pero hace falta, previamente o al mismo tiempo, que sea popular y democrática.

Sucia, rica y pobre

La mitadmasuno
La República
Domingo 3 de octubre 2010
Juan De la Puente
http://www.larepublica.com.pe/columnistas-elecciones-2010/03/10/2010/sucia-rica-y-pobre
Culminó en Lima una de las campañas electorales más sucias de los últimos tiempos. También la más ostentosa al extremo del abuso y, de paso, la más pobre en ideas movilizadoras de la sociedad. Este resultado no debería merecérselo un país que recuperó su democracia apenas hace 10 años, cuya economía ha crecido a tasas de 6% del PBI anual promedio y que proclama su inminente ingreso al exclusivo club del primer mundo.
Habría que preguntarse qué factores motivan esta dicotomía entre el enriquecimiento de la sociedad y el empobrecimiento de la democracia. Desde los economistas, un ortodoxo diría que la economía ha logrado mantenerse aislada de la política, a lo que un heterodoxo podría contestar: la buena economía no es tal si no genera resultados en la política. Desde la politología la respuesta es más desafiante porque obliga a profundizar en temas sobre los que el sistema político se ha revelado estéril: la calidad de las reglas de la elección de representantes, la calidad de los actores políticos y la calidad de los partidos.
El escenario electoral limeño pudo desarrollar escasamente la disyuntiva corrupción vs anticorrupción porque se introdujeron otras disyuntivas que jalonearon la campaña desde la ideología, en una dinámica donde todo valía, especialmente el adjetivo: terruca, mentirosa, solterona, perdedora, abogada de narcos y drogadicta, de modo que resulta que las expresiones “se meten la alcaldía al poto” y “perra” son las declaraciones electorales más relevantes.
En este contexto de bloqueo de la política por la ideología jugaron un papel crucial los medios que han actuado por encima de los políticos y en lugar de ellos, con una intensidad mayor que la ocurrida en el 2006. Varios medios expropiaron las candidaturas y las agendas electorales con la complicidad o silencio de los candidatos, lo que debería ser leído como el acto final de la privatización de la política. En adelante es muy probable que cada candidato le pertenezca más al propagandista o al que financia la campaña (o la contracampaña) y menos al partido.
Estos resultados no tendrían lugar si las reglas fuesen más eficaces para la política: límites a la publicidad electoral, financiamiento público de los partidos, obligatoriedad de elecciones primarias en los partidos o mayor auditoría de los gastos. Sin embargo ninguna ley, más que conciencia cívica, podrá devolver a los políticos su autoestima y a los medios a su lugar.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Tres análisis fallidos

La mitadmasuno
La República
Sábado 25 de setiembre 2010
Juan De la Puente
http://www.larepublica.pe/la-mitadmasuno/25/09/2010/tres-analisis-fallidos
Contra lo que se sostiene, este proceso electoral evidencia hasta ahora un desempeño aceptable de la mayoría de encuestadoras. En los dos últimos meses los sondeos difieren poco, aunque en el caso de Lima ninguno está libre de un “colombianazo”, el reciente fiasco de los estudios de opinión para la primera vuelta en ese país. Nuestro problema reside por ahora en los análisis fallidos.
El primer error fue el vaticinio sobre que la disyuntiva corrupción vs. anticorrupción era inviable en Lima debido al pragmatismo del elector. En gran parte de la campaña esta perspectiva dibujó un primer escenario dicotómico y útil para empoderar sucesivamente a las dos candidatas que lideran las preferencias. En el último tramo, al introducirse al debate otras disyuntivas, la primigenia aún es muy importante. El 3 de octubre sabremos si prima sobre las otras.
El segundo error fue el pronóstico casi general de que la intención de voto para Alex Kouri no se trasladaría a Susana Villarán, por ser ambos políticamente antagónicos. Sí lo son, aunque un grupo de electores debió cambiar sus adhesiones porque emergió un segundo escenario. La ultrapolarización a la que asistimos podría estar produciendo un tercer escenario, el de las elecciones generales adelantadas en Lima, donde lo vecinal sea menos relevante. Lourdes Flores ha logrado arrastrar a su rival a esa vorágine de modo que el debate del 27 será más ideológico/político que edil/vecinal.
El tercer equívoco fue el más clamoroso: negar la posibilidad del surgimiento de un outsider porque no aparecía alguien que potenciara ese fenómeno. Susana Villarán lo es y tiene todas las fortalezas de un outsider, aunque también sus debilidades. Podría ser que los negacionistas se hayan quedado con la visión clásica del outsider, es decir, alguien fuera del sistema político, no conocido y con soluciones radicales. Algunos amigos míos aún se resisten a reconocer en Villarán a un outsider probablemente porque consideran que un candidato es más un discurso que una imagen.
Quizás sea necesario dar una mirada al perfil del elector que presentaron hace poco el JNE, el PNUD e Ipsos Apoyo. Extraigo dos datos: al 51% le interesa más la elección presidencial frente a un 13% al que le interesa más la elección del alcalde, en tanto que para la decisión del voto pesa más el entorno personal que los medios de comunicación.
El Perfil del Elector presentado el 16 de setiembre por el JNE, PNUD e Ipsos Apoyo puede verse aquí.

domingo, 19 de septiembre de 2010

Susana Villarán o la outsider en Lima

Dos encuestas aparecidas hoy confirman el despunte de Susana Villarán frente Lourdes Flores. La del grupo La República y la PUCP aquí y de El Comercio e Ipos Apoyo aquí.
Villarán, ha saltado del 9% que tenía el 12 de agosto pasado a más del 40%. Es una perfomance típica del outsider, posibilidad que descartaban hasta hace poco muchos analistas peruanos.
Estos sondeos fomentan el debate ya abierto hace días sobre porque Villarán y no otro candidato, los errores de Lourdes Flores, la demonización de Villarán y el apoyo a esta por Jaime Bayly. Solo en vías de suministro de datos, con cargo a otro post, los hitos en el escalamiento de Villarán son dos: la tacha contra Alex Kouri y la difusión del "potoaudio".
Otro dato relevante es que Lourdes "solo" cae 8 puntos desde su intención de voto más alta registrada en julio, de modo que Villarán se alimenta de varias fuentes, de la misma Lourdes, pero también de los indecisos y de los potenciales votantes de Kouri, otro error de los analistas que predecían que era imposible un traslado de votos de este hacia la candidata de Fuerza Social.
La primera es la encuesta de La República PUCP y la segund de El Comercio/Ipsos Apoyo. La primer fue realizada a 510 personas entre el 15 y 17 de setiembre y la segunda a 593 personas entre el 16 y 17 de este mes:




Otras dos anotaciones convienen hacer. La primera, en la encuesta de LR/PUCP se advierte una relación directamente proporcional entre la falta de conocimiento de Susana Villarán (28%) y la decisión de los electores de no votar por ella en ningún caso (48%) todo ello en el mes de marzo, y el 5% de desconocimiento sobre ella y el 31% de la decisión no votar por ella en ningún caso, en la última encuesta. Esto indicaría que su demonización fue contraproducente y solo contribuyó a que se le conozca electoralmente y se le re-conozca políticamente, o que el peso de la campaña favor fue mayor que la demonización:

La segunda, en esa misma encuesta, es el alto componente del tema corrupción (44%) en la posibilidad de cambio de voto por parte del elector que ya decidió votar. Una evidencia más que la disyuntiva corrupción vs anticorrupción moviliza el voto ciudadano, a contrapelo de otro grupo de analistas que en mayo señalaban que esa dicotomía electoral no funcionaba. Funcionó para la polarización Kouri/Lourdes y para la nueva polarización Susana/Lourdes:

sábado, 28 de agosto de 2010

Mujeres en campaña

La mitadmasuno
La República
Sábado 28 de agosto 2010

Juan De la Puente
http://www.larepublica.pe/la-mitadmasuno/28/08/2010/mujeres-en-campana

Si Lourdes Flores gana las elecciones con un 35% de votos, más de un millón y medio de sufragios, habrá resistido la prueba ácida electoral. Habrá demostrado en su nombre y en del PPC, un partido orgánico al sistema político, su capacidad de generar una adhesión colectiva sustantiva a pesar de haber rebajado sus aspiraciones presidenciales. Lourdes en la alcaldía de Lima resultaría así una estrategia en clave leninista: un paso atrás, dos adelante.
Ese éxito supondría asimismo dos evidencias. Internamente, cerraría exitosamente el proceso de renovación del PPC impulsado por ella hace años, y que aupó a la dirección pepecista a una generación joven, plebeya y más dispuesta a abrirse a la sociedad. En el plano externo habría demostrado que el planteamiento de apertura de su campaña, decencia vs. corrupción, que le dio una ventaja inicial de más de 10 puntos sobre su oponente, fue políticamente correcto. Las decenas de analistas que se burlaron de la estrategia y que proclamaron que la anticorrupción no es referente electoral, guardan por ahora silencio.
Si Susana Villarán obtiene en el peor de los casos un 20% de votos, casi un millón de sufragios, habrá dado a luz una nueva criatura luego de 9 persistentes años, una nueva versión de la izquierda de código global cuyo nacimiento estaba programado para el 2006. Su movimiento, Fuerza Social, levantado a brazo partido, no surge desde la nada; es la expresión política de sectores urbanos medios, dueños de una profunda identidad ciudadana y que reclaman un lugar en una sociedad emergente. En suma, una izquierda posible en un país tomado por el conservadurismo, diferente del Partido Nacionalista en el discurso y la cultura política que comparte con aquél, sin embargo, su crítica del poder y del mercado.
En ambos casos es muy significativo que se trate de dos opciones lideradas por mujeres, una experiencia inédita en un país donde la política es machista y las mujeres son obligadas, en la mayoría de casos, a abrirse paso a codazos. Esta feminización de la opción municipal limeña se extiende a ambas listas de regidores donde se advierte un batallón de candidatas jóvenes pero experimentadas en la política y la gestión del Estado. Para redondear tanta felicidad, sería muy útil que ambas candidatas mejoren con elocuencia sus propuestas de política social para Lima, una metrópoli que guarda medio millón de pobres extremos y donde habita la exclusión más salvaje.
Véase tambien el artículo de Sinesio López
http://www.larepublica.pe/el-zorro-de-abajo/27/08/2010/polarizar-ma-non-troppo